Está claro que vivimos en una sociedad actual donde la contaminación nos influye en todo. No es cuestión de creer o no en el cambio climático, que eso se lo dejamos para los partidos políticos, es cuestión de analizar la situación y actuar con sentido común, algo que no siempre se hace.
Y es que nadie duda de que ahora mismo mueren más personas por problemas de salud relacionados con la contaminación, y eso es algo que se puede confirmar porque para eso están los datos.
También es cierto que muchas enfermedades, sobre todo los malditos cánceres que ahora asolan a muchas personas, están relacionados con la contaminación. Por lo tanto, está claro que afecta a todo. Y también a nuestra salud bucodental, que ahora mismo es muy importante.
Lo primero que vamos a hacer en este artículo es entender lo que es contaminación. En este caso lo vamos a definir como la entrada de sustancias o elementos físicos y químicos en un medio que provoca que el mismo no sea seguro o apto para el uso.
En este caso, el medio puede ser un ecosistema, un medio físico o un ser vivo. Se puede establecer por tanto, como te estamos demostrando, que existe una correlación entre la salud general y la contaminación.
Los datos de los que antes hablábamos dicen que la OMS, y de esto saben mucho, establece que más de 3 millones de muertes prematuras por enfermedades cardiorespiratorias y cardiovasculares por acción indirecta de la contaminación.
Los estudios que se han podido confirmar indican la existencia de una relación íntima entre la contaminación, el estrés y la higiene oral. Se ha demostrado que inhalar este tipo de aire provoca un aumento de la presión arterial, riesgo de obesidad, diabetes y altera nuestro metabolismo. Estos cambios a nivel general se traducen en gingivitis, periodontitis y aftas, pero ahora lo vamos a ver con un mayor análisis.
Sequedad
Como primer síntoma vamos a ver la sequedad de boca que nos produce la contaminación. Se ha comprobado que la contaminación puede alterar la calidad del aire y causarnos una sequedad bucal. Esto es debido a la exposición prolongada a ambientes que están contaminados. Seguro que en más de una ocasión has notado una falta de saliva, que es la causante de que disminuye la capacidad de neutralizar los ácidos y eliminar bacterias, aumentando el riesgo de caries y enfermedades periodontales.
También se ha comprobado que los contaminantes aumentan el estrés oxidativo en el cuerpo, Esto daña las encías y puede contribuir a tener gingivitis o periodontitis, y eso son problemas que como nos indican desde la clínica HQ Tenerife cada vez están más presentes entre los usuarios de las clínicas.
Otro problema que puede ocurrir y que nos puede ocasionar muchos problemas, es que la contaminación puede reducir la capacidad del cuerpo para combatir infecciones, incluyendo infecciones bucales como la periodontitis o las infecciones por hongos, que es lo que se llama candidiasis oral. Es decir, que vamos a comenzar a notar que somos más vulnerables a las enfermedades.
Lluvia ácida
Y es que también se ha comprobado que en zonas donde la contaminación causa lluvia ácida, el aumento de la acidez ambiental puede erosionar el esmalte dental, debilitándolo y aumentando la susceptibilidad a caries y sensibilidad dental.
El malestar provocado por contaminantes, como la sequedad o inflamación, puede desincentivar el cuidado bucal, lo que afecta hábitos como el cepillado regular o el uso de hilo dental.
Consejos
Un cepillado después de cada comida. Esa es la frecuencia ideal para el cepillado de tus dientes. El objetivo es eliminar los restos de alimentos y evitar la acumulación de sarro. En este proceso, es importante elegir un cepillo de dureza adecuada y un dentífrico con una composición adaptada a tus necesidades orales.
Nosotros también apostamos por la utilización de seda dental y del cepillo interdental, de manera que consigamos retirar los restos de alimentos en zonas de difícil acceso que de otra forma no podríamos. Y por supuesto, el colutorio será el encargado de poner el broche final a la limpieza: ayudará a hacer frente a la halitosis y será de gran ayuda en la prevención de la enfermedad periodontal.
Ya has visto que la contaminación es un factor de riesgo para la salud general y bucal, por lo que es fundamental tomar medidas para protegerse y mantener una rutina de cuidado dental adecuada, y si sigues estos hábitos, pero sobre todo lo que te digan desde los profesionales de las clínicas dentales pues todo va a ir bien.
De esta manera, hemos podido comprobar que la aparición de lesiones orales está íntimamente relacionada con la contaminación atmosférica. En este caso, el empleo de medidas de higiene oral, pueden disminuir la incidencia de las lesiones producidas.